viernes, 10 de abril de 2009
Para Gloria
Mi lectora, Gloria Salomón, me pide que le cuente por qué me fui de El Salvador. En realidad no existe un porqué, se trata de circunstancias que no son solamente personales. Hace algún tiempo en Cosas tan pasajeras he contado como fue que ocurrió mi partida. Cuento en ese relato también otras cosas. Te pongo, querida Gloria, un enlace hacia ese cuento. Otro día voy a meterme dentro de mi memoria para ver si encuentro alguna huella de las razones profundas que motivaron mi partida. Por el momento, te pido que te conformés con este enlace, pulsa pues aquí.
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te fuiste porque pueblo chico, infierno grande!!!y no es para mirar desde arriba a los paises que tienen tallas chica, pero que mas chico es tu ambito,todos los hermano/as te miran, todo el tiempo, porque no hay milliones para seguir de vista: + intensidad para - objetivos
ResponderEliminarQuerida Lily: ¡Qué va! Cuando no conocía el universo, mi ciudad era el universo. Y sigue siendo el lugar donde pasé mis ratos más felices. Puede parecer raro, todo lo que me acontece, lo mido, lo vivo, lo trato, comparándolo al recuerdo que llevo adentro de mi Santa Ana y de lo que allí viví, sufrí y gocé.
ResponderEliminarQuerida Gloria:
ResponderEliminarComo me agradecés en "Cosas tan pasajeras", también te respondo aquí:
de nada, aquí estoy para servir.
Cuando nos vas a regalar mas variaciones? Leerlas despierta en mi algo que no se como explicar, pero me gustan mucho y quisiera ver mas. Quizas es la locura del romanticismo que gobierna en mi.
ResponderEliminarLa anterior soy yo..
ResponderEliminarSe nos ha perdido Carlos Abrego!!!
ResponderEliminarQuerida Gloria:
ResponderEliminarPerdón por no haberte dado respuesta. Pronto voy a poner lo que me has pedido.
Espera un tiempito.